Hoy, vuelvo a recordar una frase de Anatomía de Grey (o de corazón, como Xavier prefiere llamarlo). He dudado mucho, mucho, pero que mucho qué frase dejar aquí escrita y sobre cuál comentar la jugada. Y he decidido que sea esta:.
¿Recuerdas cuando eras pequeña y creías en los cuentos de hadas?. Fantaseabas sobre cómo sería tu vida, con un vestido blanco y tu príncipe azul llevándote a su castillo sobre las colinas. Por la noche te echabas en la cama cerrabas los ojos y te abandonabas a tu fe. Santa Claus, el ratoncito Pérez, el príncipe azul estaban tan cerca que los saboreabas; pero vas creciendo y un día abres los ojos y los cuentos de hadas han volado. La cuestión es que es difícil dejar que los cuentos de hadas desaparezcan. A casi todo el mundo le queda una mínima esperanza de que un día abrirá los ojos y verá que se han hecho realidad. Cuando el día llega a su fin la fe es un misterio; aparece cuando menos te lo esperas, es como si un día te dieras cuenta de que los cuentos no son exactamente como habías soñado, el castillo puede que no sea un castillo... no es tan importante eso de ser felices para siempre, basta con ser felices en el momento. A veces muy de vez en cuando la gente puede darte una grata sorpresa, de vez en cuando la gente te deja sin respiración.
Me quedo sin duda, con eso de ser felices en el momento. Con disfrutar de lo que tenemos a nuestro alcance porque así y solo así podremos disfrutar de todo lo que nos rodea, aunque no sean castillos, aunque no sean príncipes ni princesas... y así y solo así podremos llegar a alguien que nos deje sin respiración, y conseguiremos crear nuestro propio cuento de hadas, 100% real. Sin zapatos de cristal, sin hadas madrinas, sin carrozas que se convierten en calabazas a las 00.00 hrs., pero con todo lo que necesitamos para ser felices, una mano que nos sujeta cuando tropezamos, una mano que nos ayuda a levantar, una mano que nos da una caricia cuando más la necesitamos...
posted by Nella at 23:34
Una mano que seque nuestras lágrimas, una mano que llegue al alma, una mano amiga que nos guíe en la oscuridad, una mano tendida siempre incondicionalmente ... eso es El Mejor Cuento de Hadas.
Carpe diem, vivir el presente sin anclarse en el pasado y sin perder la esperanza en el futuro.
VIVIR es muy sencillo, nosotros lo complicamos buscando lo que no necesitamos y no valorando lo que ya tenemos.
La vida no es un juego, los sentimientos no son un cuento, la felicidad no es una quimera.
Un abrazo con todo mi cariño, cada día me gusta más tu blog y lo hermoso que tienes el corazón.
Animo luchadora, la eterna búsqueda es un lujo que pocos saben apreciar.
Cuídate y feliz semana.